ingeniero humilla a Marco Antonio Solís sin saber que él era el dueño de la obra del foro El Sol de la tarde iluminaba la imponente estructura en construcción el foro que prometía ser uno de los más grandes e importantes del país estaba en pleno desarrollo andamios cubrían parte del edificio obreros trabajaban sin descanso y el ruido de las herramientas retumbaba en el aire en medio de todo ese ajetreo un hombre de apariencia sencilla caminaba con paso tranquilo observando cada detalle de la obra con atención vestía.

un pantalón de mezclilla gastado botas polvorientas y una camisa de Lino que aunque limpia no tenía el aspecto elegante de los trajes que usaban los ingenieros y arquitectos en el lugar llevaba un sombrero para protegerse del Sol y unos lentes oscuros que ocultaban parcialmente su rostro nadie lo reconoció al verlo entrar por la zona de acceso y su presencia no llamó la atención de inmediato sin embargo para el ingeniero principal de la obra un hombre de unos 40 años llamado Javier Mendieta aquella figura parecía fuera de lugar Javier era.

conocido por su carácter autoritario y su actitud prepotente se consideraba el líder indiscutible de la construcción y no tenía paciencia para quienes consideraba inferiores para él la gente se dividía en dos categorías los que mandaban y los que obedecían desde la plataforma donde supervisaba los avances del proyecto Javier notó al hombre caminar lentamente entre los materiales y los trabajadores frunció el seño no llevaba casco ni chaleco de seguridad y su apariencia sugería que no era parte del equipo de ingenieros mucho menos un inversor o.

cliente para Javier era evidente que aquel individuo no tenía nada que hacer allí con una expresión de fastidio bajó rápidamente las escaleras metálicas y se dirigió hacia él mientras se acercaba algunos obreros intercambiaban miradas discretas no era la primera vez que Javier reprendía a alguien por estar en el lugar equivocado y todos sabían que no tenía tacto al hacerlo eh tú exclamó Javier con voz firme deteniéndose a pocos metros del hombre quién te dejó entrar aquí el hombre se detuvo y lo miró con serenidad Había algo en su postura que.

transmitía calma como si no se sintiera intimidado por el tono hostil del ingeniero Buenas tardes respondió con cortesía solo estaba observando la obra Javier soltó una risa sarcástica y cruzó los brazos observando repitió con burla Mira amigo es Esto no es un lugar turístico Si buscas trabajo debiste presentarte en la oficina administrativa no andar merodeando como si fueras un inspector algunas risas disimuladas se escucharon entre los obreros cercanos el hombre sin inmutarse sonrió levemente no busco trabajo aclaró solo tengo interés.

en el proyecto es una obra impresionante Javier arque una Ceja y lo miró con desdén interés en el proyecto desde cuándo los albañiles sienten curiosidad por la ingeniería el comentario fue acompañado de una sonrisa burlona el hombre mantuvo la calma Aunque en sus ojos se reflejaba un Destello de paciencia puesta a prueba cualquiera puede interesarse por la arquitectura sin importar su ocupación respondió con tranquilidad Javier chasqueó la lengua con impaciencia no le gustaba que le respondieran mucho menos alguien a quien.

ya había etiquetado como insignificante Mira Viejo tengo cosas más importantes que hacer que entretenerme con charlas innecesarias dijo con desdén así que dime quién te dejó entrar porque aquí nadie sin autorización puede pasearse como si fuera dueño del lugar el hombre guardó silencio por un instante como si estuviera meditando la respuesta luego con la misma serenidad de antes contestó digamos que tengo cierto interés personal en esta obra Javier soltó una carcajada interés personal qué eres un crítico de construcción o acaso crees

que puedes darme consejos sobre cómo dirigir esto el tono burlón del ingeniero hizo que varios trabajadores desviaran la mirada incómodos con la escena sin embargo el hombre no mostró molestia alguna en cambio recorrió con la vista la estructura como si evaluara cada parte del proyecto con Genuino interés solo me gusta ver cómo avanzan las cosas dijo finalmente Pero si te preocupa mi presencia puedo retirarme Javier bufó y agitó una mano con impaciencia Sí mejor Hazlo No queremos vagos rondando por aquí con un leve asentimiento el hombre

se giró para marcharse sin embargo antes de dar el primer paso lanzó una última mirada al edificio en construcción como si estuviera midiendo su Progreso con precisión Javier aún con una expresión de burla lo observó alejarse sin imaginar que en pocas horas estaría lamentando cada una de sus palabras el sol seguía cayendo sobre la obra y el bullicio de los trabajadores llenaba el ambiente con un ritmo constante de martillazos sierras y gritos de instrucciones Javier Mendieta regresó a su puesto de supervisión tras haber despachado al

hombre de apariencia sencilla sintiéndose satisfecho por haber reafirmado Su autoridad sin embargo no pasó mucho tiempo antes de que para su molestia Viera nuevamente al desconocido Caminando por la obra esta vez observando con más detenimiento ciertas áreas específicas del proyecto el ingeniero frunció el seño ese tipo no había entendido que no era bienvenido su paciencia tenía límites y la insolencia de aqu el individuo comenzaba a irritarlo sin pensarlo dos veces descendió las escaleras metálicas con pasos firmes y decididos dirigiéndose

hacia él con el ceño fruncido y las manos en la cintura qué te dije hace un momento soltó en un tono mordaz apenas estuvo lo suficientemente cerca te pedí que te fueras O acaso tienes problemas para seguir órdenes el hombre levantó la mirada y lo observó con la misma calma de antes no parecía intimidado lo que solo sirvió para aumentar la frustración del ingeniero solo estaba echando un último vistazo respondió con tranquilidad es una obra magnífica me interesa mucho su estructura Javier bufó exasperado a ver

escúchame bien dijo con voz más alta asegurándose de que algunos trabajadores cercanos también lo oyeran aquí nadie anda echando vistazos solo porque sí esto es una obra privada y si no trabajas aquí o no tienes algo importante que hacer Entonces no tienes ningún derecho a estar aquí el hombre sin perder la compostura asintió levemente entiendo ingeniero dijo con voz pausada pero dígame qué materiales están utilizando para los cimientos Javier entrecerró los ojos sorprendido por la pregunta qué pretendía ese viejo su

pregunta le pareció Absurda pero decidió responder con Tono condescendiente concreto reforzado con acero estructural como en cualquier obra de esta magnitud cont con desdén pero dudo que eso te diga algo el hombre sonrió levemente es una elección adecuada comentó Aunque el terreno aquí es complicado Cómo han manejado la cimentación para evitar asentamientos diferenciales algunos obreros que estaban cerca dejaron de trabajar por un instante y miraron al hombre con curiosidad su pregunta no era la de un simple curioso sino la de alguien que

entendía realmente de construcción Javier resopló impaciente Mira no sé de dónde sacaste esos términos pero no necesito que un Forastero venga a cuestionar mi trabajo dijo con fastidio aquí los expertos somos nosotros no necesito clases de ingeniería de alguien que ni siquiera debería estar aquí el tono burlón del ingeniero hizo que algunos trabajadores intercambiaran miradas incómodas sabían que Javier era arrogante Pero nunca lo habían visto tan insistente en menospreciar a alguien que hasta ahora solo hacía preguntas legítimas el hombre

permaneció en silencio unos segundos antes de responder con la misma calma no pretendía dar clases ingeniero solo me gusta entender los procesos detrás de las grandes construcciones Javier soltó una carcajada seca vaya exclamó con ironía Entonces no solo eres un curioso sino también un aficionado a la arquitectura dime qué haces cuando no estás merodeando en obras ajenas dibujas planos en servilletas mientras tomas café en la plaza las risas de algunos trabajadores más jóvenes resonaron en el ambiente el hombre sin embargo no se

inmutó solo miró a Javier con expresión Serena como si no le afectaran sus palabras no es mala idea respondió con una sonrisa leve pero en realidad prefiero ver las obras en persona y hablar con quienes las construyen Javier negó con la cabeza y dio un paso hacia delante mirándolo con burla escucha amigo no me interesa que te gusta o que no si realmente quieres aprender sobre construcción te sugiero que busques un trabajo de Peón y aprendas desde abajo Aunque dudo que alguien te contrate a tu edad más risas contenidas

se escucharon alrededor el hombre sin perder la calma simplemente suspiró y asintió es un buen consejo dijo aunque creo que ya tengo algo de experiencia en esto Javier resopló con impaciencia lo que tú digas Pero te advierto que si sigues metiéndote donde no te llaman haré que seguridad te saque de aquí el hombre sonrió l mente y miró alrededor como si estuviera Disfrutando del ambiente de la obra luego volvió a mirar al ingeniero con un Destello de diversión en los ojos no se preocupe ingeniero no me quedaré mucho más tiempo

Javier cruzó los brazos y lo observó con desdén mientras el hombre volvía a caminar lentamente por la obra no entendía que le molestaba más la insistencia del desconocido o la extraña seguridad con la que hablaba como si supiera algo que los demás ignoraban lo que Javier no sabía era que en cuestión de minutos todo cambiaría Javier Mendieta observó con el ceño fruncido como aquel hombre seguía Caminando por la obra con la misma tranquilidad que si fuera su propio patio trasero algo en su actitud lo irritaba profundamente no solo era su

presencia inesperada sino la forma en que respondía con tanta calma a cada burla la mayoría de las personas en su lugar habrían bajado la cabeza y se habrían marchado pero este hombre parecía inmutable Mientras tanto algunos obreros continuaban con su trabajo aunque de vez en cuando lanzaban miradas curiosas en dirección al desconocido Había algo en él que no encajaba del todo con la imagen de un simple curioso o un obrero desempleado No hablaba como alguien cualquiera Y eso hacía que algunos comenzaran A preguntarse quién era

realmente Javier decidió que ya había tenido suficiente si ese tipo no entendía con palabras Entonces le dejaría en claro con una exhibición pública de autoridad con pasos firmes se acercó nuevamente a él y esta vez lo interceptó con una expresión más dura a ver viejo dijo con voz tajante ya tuve suficiente de tu jueguito no sé qué te crees pero este no es un lugar para que estés deambulando por qué sigues aquí el hombre levantó la vista y lo observó con la misma serenidad de antes solo quería ver más de cerca la

estructura respondió con calma es impresionante Cómo han manejado los soportes principales Javier chasqueó la lengua con impaciencia ahora te interesa la estructura soltó con burla dime también tienes opiniones sobre la distribución del peso o el diseño de las vigas el hombre sonrió levemente de hecho sí respondió Noté que algunas de las vigas en el ala este tienen una inclinación ligera eso es intencional o hay un ajuste pendiente Javier parpadeó sorprendido por la observación giró la cabeza automáticamente hacia el ala este

del edificio donde efectivamente había un ligero desnivel en la estructura era algo que él mismo había identificado días atrás y que su equipo de ingenieros estaba en proceso de corregir el ingeniero sintió una oleada de molestia Cómo era posible que este desconocido notara un detalle así a simple vista eso no es asunto tuyo espetó Cruzando los brazos es un detalle menor y ya está siendo solucionado algo más que quieras señalar señor sabelo todo el hombre no se inmutó ante la hostilidad solo era una observación dijo

con naturalidad aunque también me preguntaba si han considerado reforzar los cimientos en la zona suroeste vi que el suelo tiene una inclinación natural que podría afectar la estabilidad a largo plazo Javier sintió un escalofrío de irritación esa era otra cuestión en la que su equipo ya estaba trabajando No era un problema grave pero sí algo que requería ajustes técnicos cóm demonios este hombre podía notar esos detalles con solo caminar por la obra algunos obreros dejaron de trabajar y comenzaron a prestar más atención a la

conversación un par de ellos intercambiaron miradas comenzando a sospechar que El desconocido no era cualquier persona Javier enojado por la atención que el hombre estaba recibiendo decidió acabar con la situación de una vez mira no sé de dónde sacaste toda esa palabrería pero aquí no necesitamos consejos de un aficionado dijo con dureza Ya te lo dije antes si no trabajas aquí no tienes nada que hacer en esta obra Así que desaparece antes de que llame a seguridad para que te saquen a la fuerza el hombre sostuvo la mirada de

Javier por unos segundos no había enojo en sus ojos solo una especie de paciencia infinita como si estuviera esperando algo luego con una leve sonrisa dijo No te preocupes ingeniero creo que no será necesario que llames a seguridad antes de que Javier pudiera responder se escuchó un murmullo creciente entre los obreros un grupo de hombres bien vestidos se acercaba a la obra eran ejecutivos y administradores del proyecto personas que Javier reconoció de inmediato como parte del equipo de inversores y directivos encargados de

financiar la construcción el ingeniero se enderezó de inmediato cambiando su expresión a una más formal y profesional no quería que lo vieran discutiendo con un desconocido ingeniero Mendieta llamó uno de los hombres con Tono cordial mientras se acercaban Javier forzó una sonrisa y les extendió la mano bienvenidos señores no esperaba su visita tan temprano uno de los directivos miró alrededor y para sorpresa de Javier se dirigió directamente al hombre al que él había estado menospreciando durante todo ese tiempo seor dijo con una mezcla de

respeto y entusiasmo qué placer verlo aquí no sabíamos que vendría hoy Javier sintió que el estómago se le hundía señor Solís repitió en voz baja sintiendo un escalofrío recorrer le la espalda los obreros comenzaron a intercambiar miradas sorprendidas algunos de ellos ya habían sospechado que aquel hombre no era alguien común pero ninguno imaginó que estaban en presencia de Marco Antonio Solís el verdadero dueño de la obra el hombre sonrió con calma y se quitó los lentes oscuros dejando ver su rostro con más

claridad solo quería ver cómo iban las cosas dijo con tranquilidad y debo decir que he tenido una experiencia interesante Javier sintió como su rostro se volvía rojo había humillado Despreciado y burlado a alguien que en realidad tenía el poder absoluto sobre el proyecto y sobre su propio futuro en él los directivos continuaron saludando a Marco Antonio Solís con entusiasmo mientras que Javier se quedaba en silencio sintiendo como su arrogancia se desmoronaba en cuestión de segundos el ambiente en la obra cambió

por completo ahora todas las miradas estaban sobre él y por primera vez en mucho tiempo Javier Mendieta no supo qué decir Javier Mendieta sintió como la sangre le abandonaba el rostro mientras observaba el saludo cordial entre los directivos Y aquel hombre al que había despreciado con tanta arrogancia su mente intentaba procesar la escena pero todo en su interior se negaba a la realidad que se desplegaba frente a él señor Solís Es un honor tenerlo aquí Dijo uno de los inversionistas estrechando la mano del hombre con una

expresión de respeto absoluto si nos hubiera avisado habríamos organizado una recepción más adecuada Marco Antonio Solís sonrió con serenidad y negó con la cabeza no era necesario respondió con Tono afable solo quería ver con mis propios ojos cómo iba el proyecto ya sabes es un sueño que llevo años planeando Javier sintió que su garganta Se secaba un sueño que llevaba años planeando esas palabras resonaron en su mente con un peso insoportable todo comenzaba a encajar ese hombre no solo tenía conocimiento sobre construcción era el

propietario del proyecto el visionario detrás de la obra y él Javier Mendieta lo había tratado como a un intruso sin importancia burlándose de su apariencia y minimizando sus observaciones los obreros que hasta hacía unos minutos solo eran pasivos de la conversación comenzaron a intercambiar miradas de asombro algunos susurraban entre sí mientras otros miraban directamente al ingeniero esperando ver cómo reaccionaría ahora que se sabía la verdad uno de los directivos notó la expresión petrificada de Javier y le dirigió una mirada

inquisitiva ingeniero Mendieta dijo en tono expectante ya tuvo la oportunidad de hablar con el señor Solís sobre los avances del proyecto la pregunta fue como un golpe directo al estómago Javier sintió como el sudor comenzaba a acumularse en su frente su mente trabajaba a toda velocidad intentando encontrar una forma de salir de aquella situación humillante se aclaró la garganta tratando de recuperar la compostura Bueno yo balbuceo evitando la mirada de Marco Antonio Solís no estaba al tanto de que el señor Solís nos honrara con su visita hoy el

inversionista arque una Ceja desconcertado no estaba al tanto repitió creí que lo lo habríamos informado con anticipación antes de que Javier pudiera responder Marco Antonio Solís tomó la palabra con la misma calma que había mostrado durante toda la conversación en realidad la visita fue SAP espontánea dijo quería recorrer la obra sin anuncios ni formalidades a veces es bueno ver las cosas desde una perspectiva diferente Javier sintió como su corazón latía con fuerza sabía exactamente lo que Marco Antonio Solís estaba diciendo sin

decirlo su perspectiva di no había sido otra que la de un hombre común alguien que a ojos del ingeniero no merecía más que desprecio y humillación uno de los ejecutivos rió con amabilidad eso es muy propio de usted señor Solís siempre tan humilde y observador Javier tragó saliva con dificultad humilde esa palabra lo golpeó con fuerza aquel hombre a pesar de ser el dueño del proyecto no había llegado rodeado de guardaespaldas ni con un séquito de asistentes aduladores se había presentado solo con ropa sencilla

y una actitud Serena no había exigido reconocimiento ni buscado imponer Su autoridad de inmediato y él en su soberbia lo había tratado como a un don nadie ingeniero Mendieta la voz de Marco Antonio Solís lo sacó de su ensimismamiento tengo que decir que me ha impresionado su compromiso con la seguridad de la obra Javier parpadeó sorprendido por las palabras de Disculpe Marco Antonio Solís sonrió levemente después de todo no cualquier persona se Tom toma tan en serio la supervisión como para enfrentarse a un desconocido y

exigirle que se retire eso demuestra carácter Javier sintió un atisbo de alivio tal vez aún había una oportunidad de salvar su imagen por supuesto señor Solís dijo con un tono más seguro la seguridad de la obra es mi prioridad no podemos permitir que cualquier persona ajena ingrese sin autorización Marco Antonio solisa sintió como si estuviera de acuerdo eso es cierto dijo pero también es importante recordar que no todo se mide por las apariencias el alivio de Javier se desvaneció al instante dicho esto Marco Antonio Solís

Lo miró directamente Me gustaría saber cómo ha sido su experiencia con esta obra hasta ahora La pregunta era simple pero el peso detrás de ella era abrumador Javier supo en ese instante que estaba siendo puesto a prueba no había excusas que pudieran borrar su actitud anterior Marco Antonio Solís lo estaba enfrentando con educación Pero la lección era evidente había juzgado mal y ahora debía enfrentar las consecuencias el silencio que se formó en la obra fue ensordecedor Cada trabajador cada directivo presente

estaba a la espera de lo que ocurriría a continuación Javier Mendieta por primera vez en su carrera se encontró sin palabras Javier Mendieta sintió Como cada mirada en la obra se clavaba en él como dagas afiladas la pregunta de Marco Antonio Solís aún flotaba en el aire me gustaría saber cómo ha sido su experiencia con esta obra hasta ahora era una pregunta simple en apariencia pero detrás de ella se ocultaba un juicio implícito no se trataba solo de la construcción en sí Sino de la actitud que había demostrado

en aquel sitio Javier tragó saliva y forzó una sonrisa tensa ha sido un reto sin duda respondió intentando sonar profesional pero mi equipo y yo hemos trabajado arduamente para asegurarnos de que todo avance según lo planeado Marco Antonio Solís asintió levemente Eso me alegra dijo con voz calmada sin embargo me gustaría preguntarle algo más ingeniero Mendieta Javier sintió un escalofrío recorrer su espalda por supuesto señor Solís respondió intentando ocultar su incomodidad cuando llegué usted asumió que yo era un

intruso dijo Marco Antonio sin rodeos no me preguntó quién era ni por qué estaba aquí solo supuso que no pertenecía a este lugar Javier sintió que un nudo se formaba en su garganta un silencio tenso cayó sobre la obra algunos obreros desviaron la mirada como si temieran ser testigos de la humillación inminente del ingeniero yo balbucio Javier buscando desesperadamente una respuesta que Lo sacara de esa situación solo estaba velando por la seguridad del proyecto Marco Antonio inclinó levemente la cabeza velando por la seguridad o

haciendo juicios apresurados Javier sintió que el aire le faltaba La pregunta era directa imposible de esquivar el silencio Se hizo aún más pesado uno de los inversionistas carraspeo incómodo con la situación pero nadie intervino todos sabían que Marco Antonio Solís tenía derecho a exigir una explicación Javier cerró los ojos un instante y suspiró consciente de que cualquier mentira solo empeoraría las cosas cometí un error admitió con voz baja Aunque su orgullo luchaba contra cada palabra que salía de su boca supuse

que usted no tenía derecho a estar aquí solo por su apariencia algunos obreros intercambiaron miradas sorprendidas no esperaban que el ingeniero admitiera su equivocación tan rápido Marco Antonio Solís lo observó con la misma calma de siempre lo aprecio ingeniero Mendieta dijo No todos tienen la humildad de reconocer sus errores Javier sintió un leve alivio pero el empresario no había terminado sin embargo la arrogancia no solo afecta a quien la ejerce continuó Marco Antonio también impacta a quienes trabajan Bajo su

mando cómo puede liderar un equipo si juzga a las personas sin siquiera conocerlas Javier sintió el peso de las palabras como un golpe en el estómago siempre se había considerado un profesional competente pero jamás se había detenido a pensar en cómo su actitud afectaba a los demás miró a su alrededor los obreros que lo habían acompañado durante meses de trabajo lo miraban ahora con una mezcla de expectativa y escepticismo algunos asintieron levemente como si finalmente vieran que el ingeniero comprendía su error Marco

Antonio Solís dio un paso hacia adelante acortando la distancia entre ambos Esta obra no es solo concreto y acero ingeniero dijo Es un proyecto que representa esfuerzo dedicación y trabajo en equipo y para que funcione cada persona aquí debe ser valorada desde el arquitecto hasta el último obrero Javier bajó la mirada nunca se había sentido tan pequeño Marco Antonio guardó silencio por un momento dejando que sus palabras se asentaran en la mente del ingeniero luego miró a los creo que es un buen momento para evaluar.

cómo está funcionando la administración de la obra dijo con serenidad Porque si el liderazgo aquí no refleja los valores de este proyecto Tal vez sea necesario hacer algunos cambios las palabras cayeron como un martillo Javier sintió que su estómago se contraía cambios se refería a él uno de los inversionistas asintió lentamente tiene razón señor Solís dijo evaluaremos la situación y tomaremos las medidas necesarias Javier sintió que el suelo bajo sus pies se volvía inestable todo lo que había construido con tanto

esfuerzo estaba en peligro por su propia soberbia Marco Antonio Solís Lo miró una última vez antes de girarse hacia los obreros sigamos adelante con el trabajo dijo aún hay mucho por hacer los obreros asintieron y poco a poco volvieron a sus tareas Aunque el murmullo de la conversación aún flotaba en el aire Javier Mendieta en cambio permaneció inmóvil sintiendo por primera vez en su vida el peso real de sus actos El eco de las palabras de Marco Antonio Solís aún resonaba en la mente de Javier Mendieta mientras observaba como los

obreros volvían lentamente a sus tareas el bullicio del trabajo reanudado contrastaba con el silencio sepulcral que se había instalado en su interior por primera vez en mucho tiempo el ingeniero sintió que no tenía el control de la situación siempre se había considerado una autoridad en su campo alguien que imponía respeto con su conocimiento y disciplina pero en ese moment se dio cuenta de que el respeto no se exigía sino que se ganaba con acciones y carácter un ejecutivo se acercó a él con una expresión seria ingeniero Mendieta dijo en tono.

formal nos reuniremos con la junta para evaluar lo ocurrido hoy hasta entonces le pedimos que tome unos días fuera de la obra Javier sintió un nudo en la garganta su orgullo le decía que protestar que se defendiera Pero sabía que cualquier excusa solo lo haría ver aún peor con un leve asentimiento aceptó la decisión antes de irse dirigió una última mirada a Marco Antonio Solís quien lo observaba con una expresión tranquila pero firme no había rencor en sus ojos solo una Clara advertencia de que las acciones tenían Consecuencias al.

salir del lugar Javier reflexionó sobre lo ocurrido recordó su actitud desde el primer momento en que había visto a Marco Antonio Solís vestido con ropas sencillas lo había juzgado sin conocerlo lo había humillado sin razón y ahora estaba pagando el precio de su arrogancia pasaron varios días en ese tiempo Javier tuvo la oportunidad de pensar en todo lo que había sucedido por primera vez se preguntó Cuántas veces en su carrera había tratado a otras personas con la misma soberbia Cuántos obreros habían soportado su actitud sin decir nada.

cuando finalmente Fue llamado de vuelta a la obra no sabía qué esperar al llegar lo recibió uno de los inversionistas quien le informó que no sería despedido pero que su papel dentro del proyecto sería revisado de cerca también le recomendaron trabajar en su actitud con el equipo Javier sabía que era su última oportunidad los días siguientes fueron diferentes por primera vez comenzó a observar a los obreros no solo como trabajadores sino como personas con experiencia y habilidades valiosas en lugar de imponer Su autoridad con.

arrogancia empezó a escuchar a dialogar y a aprender de quienes llevaban años en la construcción poco a poco el ambiente en la obra cambió algunos aún lo miraban con recelo pero otros empezaron a notar la diferencia en su comportamiento una tarde mientras supervisaba una parte del proyecto sintió una presencia a su lado al voltear vio a Marco Antonio Solís mirándolo con una leve sonrisa Me alegra ver que has aprendido algo de esta experiencia ingeniero dijo con tranquilidad Javier asintió sintiendo una mezcla de vergüenza y gratitud fue.

una lección dura pero necesaria respondió gracias por darme la oportunidad de corregir mis errores Marco Antonio Solís sonrió y le dio una palmada en el hombro siempre hay tiempo para cambiar lo importante es aprender y seguir adelante Javier lo vio alejarse y supo que aunque su reputación había sido afectada aún tenía la oportunidad de reconstruirse como un mejor profesional y sobre todo como una mejor persona.