matones se burlan de un joven sin saber que es un maestro en artes marciales Qué harías si aquellos que te humillan descubrieran demasiado tarde que eligieron a la víctima equivocada en una escuela donde la ley del más fuerte Parecía reinar un grupo de matones creía tener el control absoluto cada día encontraban una nueva forma de hacer sufrir a los más débiles sin imaginar que entre ellos había alguien que guardaba un secreto a aterrador un joven siempre callado siempre Solitario soportaba en silencio las burlas y agresiones lo veían como un

blanco fácil alguien incapaz de defenderse pero lo que nadie sabía era que ese mismo chico frágil poseía un poder que podría cambiarlo todo en un solo instante y ese día estaba por llegar el pasillo de la escuela retumbaba con el bullicio de los todos sabían Quiénes eran los dueños del lugar Bruno Sergio y Esteban tres chicos arrogantes que se divertían intimidando a cualquiera que pareciera débil y hoy como siempre Su objetivo era el mismo Mateo Mateo era delgado introvertido y siempre caminaba con la cabeza gacha

nunca respondía a las burlas nunca levantaba la voz para los matones esto lo convertía en la ima perfecta míralo siempre con esa cara de perdedor se burló Bruno empujándolo contra los casilleros los demás estudiantes miraban algunos con pena otros con miedo nadie intervenía después de todo enfrentar a Bruno y su pandilla significaba convertirse en el próximo objetivo Por qué no nos dices algo Mateo preguntó Sergio con una sonrisa burlona vamos defiéndete Mateo apretó los puños sintiendo la rabia crecer dentro de él

no era la primera vez que lo acosaban sabía que si respondía las cosas podrían escalar Así que como siempre respiró hondo y se alejó en silencio pero los matones no estaban satisfechos no tan rápido Esteban extendió el pie y Mateo tropezó cayendo al suelo frente a todos las risas estallaron a su alrededor un grupo de chicas grababa con sus teléfonos qué patético Bruno se cruzó de brazos cómo es posible que alguien como tú exista Mateo sintió el calor subir a su rostro no por la caída sino por la humillación sabía que podía acabar con

ellos en segundos que con un solo movimiento podría hacerlos rogar Por piedad pero no podía no debía sin decir una palabra recogió sus libros y se alejó con las carcajadas aún resonando en sus oídos lo que los matones no sabían era que acababan de cometer un error fatal Mateo caminó hasta el gimnasio vacío de la escuela su Refugio secreto allí lejos de miradas curiosas pudo finalmente soltar el aire contenido en sus pulmones su paciencia tenía un límite y esos idiotas estaban cada vez es más cerca de cruzarlo se quitó la

chaqueta y la arrojó al suelo frente a él un viejo saco de boxeo colgaba en la esquina se acercó lentamente y con un movimiento rápido lanzó un puñetazo el impacto fue tan fuerte que el Saco se sacudió violentamente como si hubiera sido golpeado por un luchador profesional Mateo no era el chico frágil que todos creían desde que tenía 6 años su abuelo un legendario maestro de artes marciales lo había entrenado en secreto karate yitsu ta Mateo dominaba técnicas que podían derribar a cualquier adversario en segundos pero su abuelo

siempre le enseñó una regla un verdadero Guerrero solo lucha cuando es absolutamente necesario por eso aunque cada burla lo hacía hervir por dentro Mateo nunca reaccionaba hasta ahora esta vez algo era diferente sentía que su paciencia se estaba agotando que si los matones cruzaban un límite más él no se contendría de pronto la puerta del gimnasio se abrió Mateo se tensó girándose con rapidez era Camila una de las pocas personas que nunca se reía de él otra vez ellos preguntó apoyándose en la pared Mateo asintió en

silencio no entiendo por qué no haces nada dijo ella con un suspiro sé que eres fuerte lo vi con mis propios ojos el otro día cuando golpeaste ese saco como si fuera de papel Mateo bajó la mirada no quiero problemas Camila frunció el ceño problemas ellos ya son un problema y no se van a detener hasta que alguien les dé una lección Mateo respiró hondo Solo actúo cuando es necesario Camila lo observó con detenimiento como si intentara entenderlo Espero que sepas cuándo ese momento llegue Mateo porque está más cerca de lo que crees dicho esto se giró

y salió del gimnasio dejándolo con sus pensamientos Mateo apretó los puños en el fondo sabía que Camila tenía razón la tormenta estaba por venir y él debía estar listo el sol ardía en el cielo cuando Mateo salió al patio durante el creo quería un poco de aire alejarse de todo pero apenas dio unos pasos la voz burlona de Bruno lo detuvo miren quién está aquí gritó el matón llamando la atención de todos Sergio y Esteban lo rodearon con sonrisas maliciosas era como un juego para ellos ayer no terminamos nuestra conversación verdad

Mateo dijo Sergio dando una palmada en su hombro Mateo respiró profundo no quería problemas pero tampoco huiría Déjenme en paz respondió con calma Bruno fingió sorpresa Oh qué miedo qué harás si no lo hacemos Nos mirarás con esa cara de cachorrito triste las risas estallaron a su alrededor pero Mateo no se inmutó Camila que observaba desde lejos sintió un mal presentimiento déjenlo Ya dijo ella adelantándose pero Bruno solo se río lo ves Mateo hasta las chicas creen que eres un inútil que no puede defenderse Mateo sintió un nudo en

el estómago pero antes de que pudiera responder Sergio metió la mano en su mochila y sacó un pequeño cuaderno veamos qué secretos esconde nuestro amigo dijo abriendo las páginas Mateo se puso rígido ese cuaderno no era cualquier cosa era su diario Bruno lo tomó y comenzó a leer en voz alta a veces Desearía poder defenderme pero no quiero lastimar a nadie leyó con una voz exagerada y burlona los estudiantes comenzaron a reír Mateo sintió Un calor recorrer su cuerpo su paciencia se estaba rompiendo Pero entonces Bruno

arrancó una página y la hizo pedazos Ups se me resbaló dijo con una sonrisa cruel eso fue el límite sin previo aviso Mateo levantó la mirada con una intensidad que nunca antes habían visto en él Bruno aún sonreía pero algo en los ojos de Mateo lo hizo titubear devuélvelo dijo Mateo su voz ahora firme sin rastro de miedo pero Bruno terco y confiado solo rió o qué Mateo avanzó un paso última advertencia el silencio cayó sobre el patio nadie había escuchado a Mateo hablar así antes los matones se miraron entre sí algo

desconcertados qué harás provocó Esteban Mateo exhaló lentamente bien ustedes lo pidieron y en un parpadeo Todo cambió con un movimiento rápido y preciso Mateo sujetó la muñeca de Bruno retorciéndose [Música] qué diablos murmuró Sergio dando Un paso atrás pero ya era tarde Mateo no había terminado giró sobre su propio eje y con un solo golpe bien calculado en la pierna de Esteban lo hizo caer de rodillas Sergio intentó abalanzarse sobre él pero Mateo simplemente se apartó con agilidad y antes de que el matón pudiera reaccionar Mateo lo

derribó con una barrida limpia el patio entero estalló en gritos de asombro los tres matones yacían en el suelo jadeando de dolor y shock Mateo recogió su cuaderno con tranquilidad mientras Bruno lo miraba desde el suelo con los ojos desorbitados qui quién eres balbuceo Mateo Lo miró fijamente soy alguien a quien nunca debiste haber subestimado y con eso se dio la vuelta y se alejó dejando atrás un silencio absoluto nadie volvería a verlo de la misma forma otra vez el rumor se esparció como fuego Mateo el chico tímido y frágil había humillado a

los matones frente a toda la escuela nadie podía creerlo al día siguiente cuando Mateo entró al edificio algo había cambiado los mismos estudiantes que antes se reían de él ahora lo observaban con respeto y hasta un poco de miedo las miradas burlonas se habían convertido en miradas de asombro Camila se acercó con una sonrisa vaya eso fue impresionante dijo Cruzando los brazos Mateo suspiró no quería hacerlo Pero me obligaron te arrepientes él se quedó en silencio un momento no Camila asintió lo imaginé pero no todos estaban

impresionados Bruno Sergio y Esteban estaban furiosos desde lejos Bruno observaba a Mateo con los puños cerrados su orgullo estaba destrozado nos hizo quedar como unos idiotas murmuró Esteban Bruno entrecerró los ojos esto aún no ha terminado y qué vamos a hacer preguntó Sergio aún frotándose el brazo adolorido Bruno sonrió con malicia si quiere jugar a ser un Guerrero tan fuerte es en verdad Mientras tanto Mateo sintió un escalofrío en la espalda sabía que la venganza estaba en camino pero lo que los matones no sabían es que él ya

estaba listo el gimnasio de la escuela estaba en completo silencio todos los estudiantes habían recibido la misma invitación anónima en sus teléfonos hoy después de clases el Cobarde de Mateo contra Bruno no se lo pierdan Mateo observó el mensaje en su pantalla y suspiró sabía que esto pasaría cuando llegó al gimnasio una multitud ya se había reunido Bruno Sergio y Esteban lo esperaban en el centro con sonrisas maliciosas sabíamos que vendrías dijo Bruno tronás no me gustan los juegos sucios respondió Mateo con la voz tranquila

Bruno soltó una carcajada y qué harás al aso Aquí no hay maestros no hay reglas solo tú contra nosotros Camila empujó entre la multitud y se acercó a Mateo esto es una trampa susurró con preocupación son tres contra uno Mateo le lanzó una mirada Tranquila no te preocupes Camila Lo miró confundida Hasta que vio la expresión de Mateo no había miedo en su rostro solo determinación no dio un paso adelante terminemos con esto sin previo aviso se lanzó contra Mateo con un puñetazo directo al rostro Pero esta vez Mateo no se movió esperó

hasta el último segundo y con un simple giro de muñeca desvió El golpe con una facilidad humillante Bruno tropezó hacia delante completamente desequilibrado Mateo ni siquiera se había esforzado qué ó el matón Mateo suspiró eres lento la multitud contuvo la respiración Mateo acababa de insultarlo Bruno furioso intentó otro golpe esta vez con más fuerza pero Mateo lo esquivó de nuevo moviéndose con la precisión de un experto demasiado predecible dijo Mateo sin perder la calma Bruno rugió de rabia y se lanzó con todas sus fuerzas pero Mateo

simplemente lo derribó con un solo movimiento Bruno cayó al suelo Con un fuerte golpe el silencio en el gimnasio era absoluto maldito Sergio y Esteban corrieron hacia Mateo al mismo tiempo pero Mateo estaba preparado esquivó el ataque de Sergio y con un giro rápido usó su propio impulso para lanzarlo al suelo Esteban intentó agarrarlo por la espalda pero Mateo se agachó y con un barrido limpio lo derribó en segundos tres matones en el suelo un solo golpe para cada uno el gimnasio estalló en gritos y aplausos lo que acababa de

suceder era una humillación absoluta Bruno todavía en el suelo miró a Mateo con los ojos llenos de Furia y miedo Mateo se agachó a su lado y habló en voz baja solo para él no vuelvas a meterte conmigo no vuelvas a meterte con nadie entendido Bruno asintió rápidamente toda su arrogancia se había desvanecido Mateo se levantó y miró a su alrededor todos lo observaban con asombro ya no era el chico débil era un guerrero el gimnasio seguía en silencio cuando Mateo se giró y caminó hacia la salida había demostrado su punto Pero antes de que

pudiera irse una voz rompió la atención Mateo se detuvo y miró hacia atrás era Camila sonriendo con Orgullo y entonces algo inesperado ocurrió los estudiantes comenzaron a aplaudir primero unos pocos luego más y más hasta que todo el gimnasio se llenó de vítores el chico que todos creían débil había demostrado ser el más fuerte Bruno Sergio y Esteban permanecían en el suelo sin atreverse a levantar la mirada no solo habían sido derrotados físicamente su reinado de terror había terminado Mateo salió del gimnasio sin decir una palabra más pero

a partir de ese día nadie volvió a meterse con él ni con nadie más el miedo había cambiado de bando al día siguiente Mateo se sentó en su lugar de siempre esperando la clase Pero esta vez algo era diferente puedo sentarme aquí preguntó una voz era un chico de primer año el mismo que los matones solían acosar Mateo sonrió y asintió claro poco a poco otros estudiantes se le acercaron ya no era invisible Camila pasó junto a él y le guiñó un ojo Supongo que al final sí sabías cuándo actuar Mateo soltó una pequeña risa Supongo que sí y por

primera vez en mucho tiempo se sintió realmente libre la historia de Mateo nos enseña que la verdadera fuerza no está en los músculos sino en la paciencia la disciplina y el momento adecuado para actuar a veces es necesario alzar la voz para poner un alto a las injusticias pero lo más importante es recordar que el verdadero poder no está en la violencia sino en la confianza en uno mismo ahora dime alguna vez subestimaste a alguien sin conocer su verdadera fuerza déjalo en los comentarios queremos conocer tu opinión