Mi cuñada intentó robarse a mi esposo tras descubrir que era adoptada, pero sus padres la desheredan por mirar a su hermano. Edición: Para aclarar, mi cuñada es la hermana adoptiva de mi esposo. La acogieron en la familia cuando era niña. Crecieron como hermanos, pero hace unos años descubrió que era adoptada.

 Esa revelación pareció cambiar su perspectiva y desarrolló un enamoramiento inapropiado por mi esposo, que se volvió obsesivo durante su estancia con nosotros. Yo, de 32 años, llevo 5 años casada con mi esposo de 34 años y ocho juntos. Mi cuñada tiene 30 y recientemente terminó con un novio de forma bastante mala.

 Según ella, su ex era controlador y emocionalmente abusivo, aunque he aprendido a no tomar muy en serio lo que dice ella. Cuando ella mencionó por primera vez mudarse a nuestra ciudad, mi esposo sugirió que se quedara con nosotros temporalmente hasta que encontrara su propio lugar. No me entusiasmaba la idea, pero acepté porque pensé que serían solo un par de semanas.

Eso fue hace dos meses. La razón de por qué ha estado viviendo tanto tiempo con nosotros son varias, pero ninguna de ellas es razonable. Mi cuñada ponía excusas sobre por qué no podía encontrar un departamento. Todo era demasiado caro, o en una zona mala o no tenía algo que ella quería.

 Detalles que uno tiene que aceptar cuando su presupuesto no es el mejor. No puedes pretender tener dos baños cuando no tienes ni trabajo. Empecé a sospechar que no tenía intención de mudarse. Como al mes de su estancia, noté cambios en su comportamiento alrededor de mi esposo. Empezó a vestirse distinto cuando él estaba en casa.

 Scotes, shorts cortos, todo el paquete. Luego noté como constantemente necesitaba su ayuda con las cosas más ridículas, que había que configurar su teléfono, que su laptop estaba fallando, que no podía averiguar cómo usar la televisión, a pesar de que no es una idiota, al menos no en lo tecnológico. Mi esposo no veía nada malo en eso.

 Cuando mencioné que su hermana parecía estar encontrando muchas excusas para llamar su atención, dijo que yo estaba exagerando, que al final eran hermanos, que se conocían de toda la vida y que ella no podía pensar nada raro con él. Luego vino el incidente del baño. Mi esposo se estaba duchando y a pesar de la puerta cerrada y el obvio sonido del agua corriendo, mi cuñada accidentalmente entró.

 Yo estaba en la cocina y la escuché reírse, seguida de un exagerado, ay, Dios, perdón. Cuando salió, tenía la cara enrojecida y una sonrisita que me hirvió la sangre. Cuando le pregunté qué había pasado, solo dijo que no se dio cuenta de que él estaba ahí. Esa noche, después de que mi cuñada se fuera a su cuarto, me enfrenté con mi esposo.

 Le dije que no me gustaba como su hermana se comportaba con él y que necesitaba poner límites. Se puso a la defensiva diciendo que ella solo era cariñosa y que así habían sido siempre como hermanos. Eso era una mentira descarada. Llevo 8 años con él y jamás los vi actuar así. antes. La discusión terminó con el aceptando a regañadientes hablar con ella sobre respetar el espacio personal, pero pude notar que aún creía que yo estaba exagerando.

 Una semana después tuve mi oportunidad. Mi esposo dejó el teléfono en la encimera mientras salía a sacar la basura. Estaba desbloqueado. Revisé sus mensajes con mi cuñada y vi que las conversaciones más recientes habían sido borradas. Me pareció raro, ya que él nunca borra mensajes. Sabía que había formas de recuperar textos eliminados.

 Tras una búsqueda rápida, encontré una app que podía ayudar. Lo que descubrí me revolvió el estómago. Mi cuñada le había estado enviando a mi esposo fotos inapropiadas y mensajes llenos de insinuaciones. Cosas como, “Siempre me he preguntado cómo sería estar con alguien como tú. Nunca piensas en lo que podría haber sido si me hubieras conocido primero”.

 Las respuestas de mi esposo no eran tan explícitas, pero tampoco le ponían un alto. Mayormente cosas como, “¿Estás loca o no deberías decir esas cosas?” Ni una sola vez le dijo que parara o que era inapropiado. Cuando lo confronté con lo que encontré, volvió a ponerse a la defensiva, diciendo que nunca la alentó y que solo estaba intentando manejarlo sin hacer un drama de la situación.

 Según él, borró los mensajes porque no quería que yo los viera y me enojara. Muy tarde para eso. Pedí una pequeña cámara de seguridad y la instalé en nuestra sala con un ángulo que captaba la mayor parte de las áreas comunes. Las grabaciones que capturé en los días siguientes confirmaron todas mis sospechas.

 Cuando yo no estaba en casa, mi cuñada se paseaba solo con una toalla después de ducharse, cronometrándolo convenientemente para cuando mi esposo estaba en la sala. se agachaba sin necesidad frente a él, le tocaba el brazo o el hombro cada vez que le hablaba y, en general, actuaba como un adolescente con un enamoramiento. La grabación más incriminatoria llegó dos días después.

 Yo estaba en la tienda y mi esposo estaba trabajando desde casa. Mi cuñada se le acercó mientras él estaba en el sofá con la laptop, se sentó a su lado y tras conversar un poco, se inclinó e intentó besarlo. Para su crédito, mi esposo la apartó de inmediato y se puso de pie. se veía enojado. Dijo algo que no pude escuchar bien en el audio y luego tomó la laptop y se fue a nuestro dormitorio cerrando la puerta.

 Cuando llegué a casa, no mencionó nada de lo que había pasado. Esa noche le mostré la grabación de su hermana intentando besarlo y le pregunté por qué no me lo había dicho. Se le notó la vergüenza y admitió que mi cuñada llevaba semanas insinuándose. Afirmó que había intentado manejarlo sin provocar una ruptura familiar, especialmente porque ella estaba vulnerable tras la ruptura. Llamé basura a esa excusa.

 Su lealtad debía ser conmigo, su esposa, no con su hermana, con ese comportamiento depredador. A la mañana siguiente, esperé a que mi esposo se fuera al trabajo y luego le mostré a mi cuñada las grabaciones que había reunido. Su cara pasó del socal enojo y a las lágrimas falsas en segundos. Cuando se dio cuenta de que llorar no iba a funcionar, dejó la actuación y admitió todo.

 Dijo que siempre me había tenido celos y que sentía algo por mi esposo desde hacía años. Según ella, él le había dado señales mixtas y la había alentado desde que se mudó. Sabía que eso era mentira. Mi esposo puede ser evitativo del conflicto y demasiado pasivo para cortar en seco las insinuaciones, pero no las estaba fomentando.

 Le dije a mi cuñada que tenía 48 horas para empacar sus cosas y salir de la casa. Se puso a llorar de nuevo, esta vez diciendo que no tenía a dónde ir y que aún no podía costear un lugar por su cuenta. No me importó. Llamé a mis suegros ese mismo día para informarles lo que estaba pasando. Siempre me han tenido cariño, pero mi cuñada es la niña consentida, así que no me sorprendió que al principio la defendieran.

 Sugirieron que quizá yo estaba malinterpretando, que no podía pasar algo así entre hermanos. Les envié por correo algunos de los vídeos. 20 minutos después, mi suegra devolvió la llamada, se disculpó profusamente y dijo que no tenía ni idea de que su hija haría algo así. Aún así, preguntaron si podíamos manejarlo discretamente para evitar avergonzar a la familia.

 Les dije que no me interesaba hacer un escándalo público, pero que tampoco iba a permitir que mi cuñada se quedara en nuestra casa ni un día más de lo necesario. Cuando mi esposo llegó esa noche, le conté sobre mi conversación con sus padres y mi ultimátum a mi cuñada. Me respaldó por completo.

 Fue al cuarto de mi cuñada y le dijo que tenía que irse ahora mismo. Ella intentó manipularlo llorando y afirmando que yo la estaba echando a la calle, pero él no cedió. Al día siguiente, mi cuñada empacó sus cosas mientras me lanzaba miradas que mataban. Al salir, se volteó hacia mí y dijo, “Esto no se ha acabado. Voy a arruinar tu matrimonio de todas formas.

” Solo le cerré la puerta en la cara. Mejor así. Las semanas siguientes demostrarían que sacarla de nuestra casa fue solo el comienzo de nuestros problemas. Ella no iba a aceptar la derrota tan fácil y estaba dispuesta a llegar a extremos para intentar conseguir lo que quería, incluso si eso significaba destruir su relación con toda su familia.

Una noche, como dos semanas después de que mi cuñada se mudara, mi suegra nos llamó entre lágrimas. Al parecer, mi cuñada la llamó borracha y se desahogó sobre cómo se había enamorado de mi esposo y que no pensaba que estaba mal porque al final era adoptada y no compartía en sangre, no eran hermanos de verdad.

 Al menos con eso había admitido deliberadamente que había intentado seducirlo y romper nuestro matrimonio. Esa llamada lo cambió todo. Nos dijeron que le habían estado enviando dinero mensualmente para ayudarle con gastos, pero después de oír su confesión decidieron cortarle el financiamiento. Unos días después recibimos una llamada frenética de mi cuñada.

 La estaban desalojando de su nuevo departamento porque no podía pagar la renta sin el apoyo económico de sus padres. nos suplicó que la dejáramos quedarse con nosotros de nuevo, prometiendo que había aprendido la lección y que respetaría nuestros límites esta vez. Mi cuñada estaba tan desesperada que sin querer admitió todas sus conductas manipuladoras diciendo cosas como, “Sé que no debí intentar romper lo que tenían ustedes, solo estaba celosa de lo que tienen.

” Grabé toda la conversación por si acaso. Ni qué decir tiene. Nos negamos a ayudarla. Mi esposo le dijo que había tomado sus decisiones y que ahora tenía que vivir con las consecuencias. le sugirió que contactara a sus amistades o buscara opciones de vivienda de emergencia, pero dejó claro que nuestra casa ya no estaba disponible para ella.

 La gota que colmó el vaso llegó cuando descubrí que mi cuñada había copiado parte de mi información financiera personal mientras se quedó con nosotros. Intentó abrir tarjetas de crédito a mi nombre, presumiblemente para endeudarnos y causarnos problemas. Por suerte, las solicitudes fueron marcadas como sospechosas y rechazadas, pero fue un llamado de atención.

 De inmediato congelamos nuestro crédito y presentamos informes ante las agencias correspondientes. Cuando mis suegros se enteraron de este último incidente, quedaron horrorizados. Convocaron una reunión familiar con parientes extendidos para hablar de la situación. En ese encuentro anunciaron públicamente que habían desheredado a mi cuñada y explicaron por qué.

 Compartieron las pruebas que habíamos reunido, los vídeos, la llamada grabada, el intento de fraude crediticio con los familiares que habían sido simpáticos a la versión de mi cuñada. Así es como salió a la luz los intentos de Alabama de mi cuñada. En las semanas siguientes supimos por varias personas que la vida de mi cuñada era bastante más que mala.

 Sin el apoyo económico de sus padres y con la noticia de lo que había hecho y con su hermano, estaba batallando para encontrar dónde quedarse. Tampoco estaba pudiendo encontrar empleo estable. Lo último que supimos fue que se quedaba en moteles baratos cuando podía pagarlos y en sofás de conocidos cuando no. No puedo asegurar que estos conocidos sepan sobre su conducta, aunque algunos descubrieron que no era buena idea dejarla quedarse en su casa.

 Intentó seducir al novio de una compañera temporal, por lo que acabó siendo echada también de allí. La verdad que no me siento para nada mal que lo esté pasando mal. No es como si fuera una pobre víctima desamparada. Intentó seducir a mi esposo, que da la casualidad que es su hermano. No sé por qué piensa que está bien, solo porque ella sea adoptada.

 Solo el hecho de conocerlo toda la vida, que lo haya tratado como un hermano, me parece repugnante. Edición: No sé desde cuando ella está enamorada de mi esposo o lo que sea que sienta por él. Ella descubrió su adopción hace unos años. Que haya comenzado luego, aún sigo pensando que es bastante malo, pero si lo hacía desde antes, creo que es mucho peor. Actualización uno.

 Creí que con mi cuñada fuera de mi casa todo regresaría a como era antes, volviendo a la normalidad de mi esposo. Pero nada es normal con mi cuñada. Sé que estaba muy mal por eso de sentir algo por su hermano, pero ahora creo que es todavía más de Lulu. Unos días después de mi publicación, mi esposo y yo estábamos fuera de la ciudad el fin de semana visitando a unos amigos que vivían a unas horas.

 Recibimos una llamada de nuestros vecinos preguntando si alguien se había quedado en nuestra casa para cuidar. La respuesta obvia era no. No necesitamos a nadie porque solo era un fin de semana. La cámara de seguridad de nuestro vecino captó a mi cuñada entrando por la puerta que va al jardín trasero. Luego, con la cámara de otro vecino al que le consultamos para saber qué había hecho, vemos que intenta abrir la puerta.

 Cuando no pudo, intentó romper una ventana. Cuando vimos lo que estaba sucediendo con las grabaciones del segundo vecino, llamamos a la policía. Arrestaron a mi cuñada por intento de allanamiento, luego de unas horas buscándola. Manejamos a casa de inmediato y nos reunimos con la policía. nos pidieron hacer una declaración y presentar una denuncia formal, ya que al ser una persona de la familia, quizás le habíamos dado algún tipo de permiso para estar en nuestra casa.

 Como dijimos a la policía que no y que ella no tenía ningún derecho a estar allí, ni en nuestra ausencia ni nunca, fue interrogada. Afirmó que solo intentaba recuperar algunas pertenencias personales que había dejado cuando se mudó, lo que la policía sabía porque nosotros le contamos y que realmente las necesitaba.

 La policía no compró esta excusa porque aunque hubiera pertenencias suyas dentro de la casa, eso no le daba derecho a entrar sin permiso de nadie. Peor aún, la policía constató que no había nada de ella. Tampoco ella pudo precisar qué tipo de pertenencias eran. Fue bastante vaga en la descripción. También le informamos a la policía que mi cuñada había robado mi información personal financiera.

 No era suficiente en su momento para una denuncia que llevara a algo, pero esta vez era un cúmulo de cosas importantes. Allanamiento, robo de información, todo. Mi cuñada quedó detenida con una fianza que no podía pagar. Ningún familiar estaba dispuesto a ayudarla, ni siquiera sus padres.

 Al final consiguió que una defensora pública la pusiera en libertad por no tener antecedentes, pero ahora sí consiguió unos por todo esto. También le impusieron mantenerse a cierta distancia de nuestra casa y de nosotros personalmente. Mis suegros finalmente la han quitado del testamento oficialmente y hasta lo que sé, no hay ningún familiar de parte de la familia de mi esposo que esté en contacto con ella.

Actualización dos. Si se acuerdan de mí, yo soy la OPE, cuya cuñada, la hermana adoptada de mi esposo, intentó un set home a la bama. Luego la cuñada fue cortada por su familia y también fue arrestada por intentar entrar a nuestra casa sin nuestro permiso. Estaba convencida de que eso sería todo. Hasta mis suegros estaban de mi lado y habían desheredado a mi cuñada.

 Por un tiempo incluso no supimos nada de ella, solo que se había mudado de ciudad y prácticamente había desaparecido. Eso fue así hasta que básicamente regresó a nuestras vidas o más precisamente a la vida de mi esposo, al que en este punto debería llamar mi ex porque estamos en proceso de divorcio. Hace unas cuantas semanas vi un mensaje bastante raro en el teléfono de mi esposo.

 Estaba agendado con otro nombre. No decía exactamente, mi hermana, la amante. Comencé a leer y la conversación de por sí era bastante rara, pero no había nada incriminatorio. Pero sí se notaba que había mensajes borrados y que había más de lo que había visto. Volví a revisar con una hab los mensajes borrados y por la conversación borrada estaba claro que mi esposo tenía una amante.

 Había cosas como que se veían para tener sexo y también se profesaban su amor y eso ya por sí solo sería bastante malo, pero todavía había más en esos mensajes. Él la llamaba como lo hacía cariñosamente a su hermana, por lo que no quedaron dudas de quién era su enigmática mujer. Y sé que aquí muchos en los comentarios dijeron en mis primeras publicaciones que era raro que mi esposo no cortara esto de raíz, pero como estuvo de acuerdo en echarla y como mi investigación no mostró que había algo más, nunca sospeché nada más. Incluso

todo lo que he podido encontrar de mensajes esta vez son solo de algunos meses atrás. Por eso estoy casi segura de que el romance es bastante nuevo, aunque puede que hayan tenido la tentación en el pasado. De todas formas, ahora no importa por qué, nuevo o viejo, me estoy divorciando de él. Claro que se lo pregunté y según su historia lo comenzaron hace poco, pero ya no importa.

 Para los curiosos, a quienes puede llegar a importarles cómo comenzó, dice que ella lo contactó hace un tiempo para contarle que había estado viviendo a solo 2 horas de aquí. Había encontrado un trabajo y hasta un lugar permanente para vivir. Al principio eran solo mensajes para ponerse al día, pero finalmente se vieron una vez que ella vino de visita y a partir de allí los mensajes fueron cada vez más orientados a sus sentimientos, los cuales, como ya sabemos ahora, fueron completamente correspondidos por mi futuro exesposo.

Él la visitaba en su ciudad o ella venía aquí para sus encuentros. A algunas personas no les parecían tan mal los sentimientos de mi cuñada con respecto a mi esposo, dejando de lado que era mi esposo, porque según su lógica, no eran hermanos de verdad. Tal vez sea la extraña aquí, pero si me crían toda mi vida con alguien al que llamo hermano y luego me dicen que es adoptado, no podría verlo de otra forma.

 Ni aunque lo supiera desde el principio, es demasiado difícil para mí. Ojalá los comentarios de Reddit tuvieran al lado del nombre el lugar de donde viven. No estoy segura, pero creo que muchos tendrían la bandera de Alabama. Estoy bromeando, pero es raro que haya tantos comentarios diciendo que no les parece tan mal esto.

De cualquier forma, esto ha traído una nueva ola de drama familiar con la familia de mi esposo, lo cual, por suerte, no es drama hacia mí, pero es drama al fin. Mi cuñada ya estaba cortada completamente de la familia, pero ahora también mi esposo se ha unido a esta exclusiva lista de dos. Son básicamente los dos enfermos que no pueden mantener sus manos alejadas de sus hermanos.

 En este punto preferiría haber sido engañada por algo más común, como su amiga, su ex o alguna compañera del trabajo. Al menos así no sería la mujer que fue engañada con la hermana. También sé los tipos de comentarios que recibiré ahora del tipo, pero eso te pasa por no haber dejado a tu esposo antes.

 No digo que estén equivocados y no negaré que fui una tonta, pero ser la OP engañada por su esposo con su propia hermana no es mucho peor que ser la OP cuyo esposo comenzó a salir con su hermana oficialmente durante el divorcio. Porque otra de las cosas que han estado ocurriendo es que básicamente mi esposo está en una relación con ella. No podemos ser solamente su familia y yo quienes veamos mal eso.

 Aunque amigos y conocidos también levantan una ceja al enterarse, creo que solo están esperando a que el divorcio se termine para hacerlo oficial. Aunque no veo como un divorcio podría lavar toda esta situación y hacerla ver mejor. La familia de ellos está completamente asqueada con la situación y yo solo estoy esperando a que esto se termine de una buena vez.

 Si ellos quieren explorar las costas de Alabama, en este punto me da igual. No serán los primeros ni los últimos, pero no cuenten conmigo para presenciarlo. Edición No hay mucho que decir de la confrontación que tuve con él cuando descubrí todo. Básicamente tuve la suficiente paciencia para escuchar su versión de eso, aunque no iba a solucionar nada.

 Y luego estuve bastante calmada como para decirle que se vaya de la casa. No había ningún punto en discutir. Cuando descubrí todo, sabía que el solo hecho de la naturaleza de esto era suficiente castigo para él. Él no tenía a dónde irse porque sabía que sus padres no lo iban a aceptar, porque le dije que lo primero que haría sería llamar a sus padres y así lo hice.

Le dije que no me importaba donde dormía, que fuera a la casa de su hermana. En otra situación, no tendría nada de malo ir a dormir a la casa de un familiar luego de una pelea. En su caso, ya sabemos. No sé dónde pasó esa noche, pero no creo que haya ido mucho más lejos de ahí, porque su relación, es decir, sin esconderse, comenzó pocas semanas después. Actualización tres.

 Fue curioso aprender tanto sobre el incesto en los comentarios de mi anterior actualización. Personas de todas partes diciendo si en su jurisdicción había cargos o no, lo cual, según aprendí, varía en cada estado y en cada condado. Bueno, aquí sí tiene penas. No tan grandes como en algunos sitios donde hay penas de prisión de hasta 10 años, pero sí los dos han recibido una multa de $8,000.

Aquí no importa si eran hermanos de sangre, mientras haya un vínculo fraternal, es suficiente para recibir una multa. Y como ha sido una situación que se ha extendido por un largo tiempo, ellos recibieron el castigo apropiado por eso. También debo decir que mi divorcio ha sido en parte culpable de esto, porque en los motivos del divorcio, mi abogado se encargó de argumentar que era por infidelidad y luego que la tercera persona era su hermana.

 Con eso obtuvimos un divorcio muy bueno, con una división de bienes favorable, pero también esta pequeña venganza en forma de multa para los dos. Cuando digo $8,000, me refiero a cada uno. No es una multa compartida ni algo por el estilo. O para que quede más claro, podemos decir que los dos deberán pagar $16,000. Mi abogado también se sorprendió, ya que al no ser abogado penal no conocía el código penal a la perfección.

 Solo sabía que eso como motivo de divorcio era una carta muy buena a nuestro favor, lo que funcionó como una forma de presentar cargos indirectamente contra ellos y como tal para que paguen esa multa. Ahora no sé qué ha sido de ellos. Su familia los ha cortado absolutamente y mi poca interacción con ellos no es para hablar de lo que hicieron sus hijos.

Lamento haber estropeado sus planes de hacerlo oficial, pero todavía existen los papeles que muestran que ellos son hermanos, porque ambos legalmente siguen siendo hijos de mis exuegros. Se me ocurren un par de ideas ahora, como, por ejemplo, pedir que un juez diga que ellos ya no sean más hijos de mis exuegros y con eso puedan hacer lo que quieran.

 Pero si te soy sincera, estoy tan cansada de todo eso que por mí pueden ser felices como quieran. Yo he obtenido todo el karma que esperaba de ellos. Por suerte, en mi vida personal, fuera de Reddit, la gente si ve mal lo que hicieron y los ha enviado al ostracismo. Planeo que esta sea mi última actualización sobre el tema. No voy a extender mucho más mis actualizaciones.

Si ellos consiguen que su historia de amor termine con un final feliz, no al estilo Disney por obvias razones, bien por ellos. Aunque Disney últimamente no sé. M.