La agrupación musical Grupo Fugitivo fue víctima de una emboscada mortal el pasado 29 de mayo en Reynosa, Tamaulipas, que dejó un saldo de cinco músicos fallecidos. El vocalista principal, Carlos González, fue el único sobreviviente de este ataque violento, después de no llegar a tiempo al lugar donde sus compañeros fueron citados en la colonia Riberas de Rancho Grande.

 

Según Rubén Isaac Valdez, familiar de uno de los músicos, González relató que, al llegar al sitio, solo encontró un terreno vacío. Al intentar comunicarse con sus compañeros sin éxito, decidió regresar a su hogar, una decisión que, lamentablemente, le salvó la vida.

 

 

Encuentran los cuerpos sin vida de 4 músicos del Grupo Fugitivo y su  representante que desaparecieron en la ciudad mexicana de Reynosa - BBC  News Mundo

 

 

 

La Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas confirmó que los restos calcinados encontrados en un predio de Reynosa pertenecen a cinco miembros del grupo: Francisco Xavier Vázquez Osorio, Nemesio Antonio Durán Rodríguez, Víctor Manuel Garza Cervantes, José Francisco Morales Martínez y el representante Livan Edyberto Solís de la Rosa. La causa de la tragedia ha conmocionado tanto a la comunidad artística como a la sociedad mexicana en general.

Las autoridades lograron la detención de nueve personas presuntamente implicadas en el ataque, quienes estarían vinculados con la facción criminal “Los Metros” del Cártel del Golfo, un grupo con fuerte presencia en la región. Las investigaciones continúan para esclarecer los motivos detrás de este brutal ataque, que según se cree, podría estar relacionado con el crimen organizado que opera en Tamaulipas.

 

 

Carlos, el vocalista de Grupo Fugitivo que está vivo por llegar tarde |  Alfredo Alvarez Noticias

 

 

La tragedia ha desatado una ola de indignación y preocupación entre los artistas y la sociedad mexicana, poniendo de manifiesto los riesgos a los que se enfrentan los músicos y figuras públicas en regiones dominadas por la violencia del crimen organizado.

 

La comunidad artística ha exigido mayor seguridad y justicia para las víctimas, mientras el caso pone en evidencia la fragilidad de la seguridad en Tamaulipas, una de las regiones más afectadas por los cárteles.

Por su parte, Carlos González, el único sobreviviente de la tragedia, permanece en un lugar seguro y su paradero actual se mantiene en secreto por motivos de seguridad.

 

A pesar de la conmoción por la tragedia, no ha emitido declaraciones públicas hasta el momento. Las autoridades han prometido seguir adelante con las investigaciones para llevar a los responsables ante la justicia.